En la Cadena Ser, en el programa La Ventana, hay un apartado semanal que Gemma Nierga hace con el escritor Juan José Millás. Consiste en que los oyentes envíen cuentos muy cortos, cada semana con un tema diferente que Millás propone. La idea me ha parecido siempre muy bonita, porque surgen cuentos de tres líneas que en ocasiones dicen mucho más que todo un libro. Así que propongo que, quien quiera, y con la temática que guste, se anime a escribir un cuento de este tipo. (Espero que la Ser no me demande por plagio).
Aquí va el mío:
Era la comida anual de la empresa. Teresa no había podido dejar a su hijo, de 4 años, con nadie, así que lo llevó a la comida, el único niño entre adultos. En un momento de silencio, el niño gritó “¡Papá!”, y todos los hombres de la mesa se volvieron y dijeron al unísono: “¿Qué?” .
FIN
jueves, 25 de septiembre de 2008
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4 comentarios:
Me hubiese gustado en ese momento ver el careto de Teresa,y el asombro de los "supuestos " papás.
Cuento corto,pero intenso seve.
elcamaleón.
Ahí va otro.
Entonces el papá del hijo del hermano del padre lloró al descubrir que en verdad su hijo no era suyo.
En el bar, como cada noche los mismos amigos. Muchos tabaco y las mismas historias. Nada interrumpia la monotona charla. Lugares comunes, edades identicas, ningún sobresalto. Ayer fue identico a hoy y una repetición de mañana...de repente el frio inundo la sala. Giraron sus cabezas a la puerta. Un resplandor iluminó la taberna como un faro en la tormenta. y de nuevo la vieron. Como cada noche. y como siempren pensaron: mañana otra vez...
Acabo de dejar mi cuento, está abierto, el que quiera que lo continúe.
Gracias Seve. Siempre tienes buenas ideas
Como no puedo publicar,lo hago en comentarios... elcamaleón.
El era alérgico a los perfumes.
Su esposa era alérgica al matrimonio.
El le contó sólo a su esposa que los aromas podían matarlo.
Ella nunca le dijo que nueve años juntos ya la habían matado.
El se resfriaba todos los inviernos.
Ella halló otro amor al décimo otoño.
El se echó a dormir.
Ella fingió hacerlo.Sólo se dio vuelta para abrir frasco.
El tosió dormido.
Ella abrió uno más.
El soñó esa noche que lo visitaban Carolina Herrera y Coco Chanel.
Cuando no hizo falta abrir otro frasco,ella,soñolienta,abrió la ventana.
El ya no soñaba.
Ella al fin durmió.
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