miércoles, 1 de octubre de 2008

Cuentos más largos






Seve publicó una entrada sobre cuentos cortos...y yo quería participar pero soy incapaz de hacer una historia con 3 líneas...la siguiente historia tampoco es mía, es una de esas cosas de todos, que recibes por e-mail de alguien que apenas recuerdas pero te arranca una sonrisa, por eso quería compartirla:


Un profesor, delante de sus alumnos de la clase de filosofía, sin decir ni una palabra, cogió un bote grande de vidrio y procedió a llenarlo con pelotas de golf. Después, preguntó a los estudiantes si el bote estaba lleno. Los estudiantes estuvieron de acuerdo en decir que sí. El profesor cogió una caja llena de perdigones y los vació dentro del bote. Estos llenaron los espacios vacíos que quedaban entre las pelotas de golf. El profesor volvió a preguntar de nuevo a los estudiantes si el bote estaba lleno, y ellos volvieron a contestar que sí.


Después, el profesor cogió una caja con arena y la vació dentro del bote. Por supuesto que la arena llenó todos los espacios vacíos. El profesor volvió a preguntar de nuevo si el bote estaba lleno. En esta ocasión los estudiantes le respondieron con un sí unánime. El profesor, rápidamente añadió dos tazas de café al contenido del bote y, efectivamente, llenó todos los espacios vacíos entre la arena. Los estudiantes reían.

Cuando la risa se fue apagando, el profesor les dijo: 'Quiero que os fijéis que este bote representa la vida. Las pelotas de golf son las cosas importantes como la familia, los hijos, la salud, los amigos, el amor, cosas que te apasionan. Son cosas que, aunque perdiéramos el resto y nada más nos quedasen estas, vuestras vidas aún estarían llenas. Los perdigones son las otras cosas que nos importan, como el trabajo, la casa, el coche... La arena es el resto de las pequeñas cosas'Continuó diciendo: 'Si primero pusiéramos la arena en el bote, no habría espacio para los perdigones, ni para las pelotas de golf. Lo mismo sucede con la vida. Si utilizáramos todo nuestro tiempo y energía en las cosas pequeñas, no tendríamos nunca lugar para las cosas realmente importantes. Presta atención a las cosas que son cruciales para tu felicidad. Ve con tu pareja a cenar, juega con tus hijos, concédete tiempo para ir al médico, practica deporte, disfruta con tu afición favorita...'..


Y terminó con: 'Siempre habrá tiempo para limpiar la casa, para reparar la llave del agua. Ocúpate primero de las pelotas de golf, de las cosas que realmente te importan. Establece tus prioridades, el resto solo es arena'.


Uno de los estudiantes levantó la mano y le preguntó qué representaba el café. El profesor sonrío y le dijo:'¡Me encanta que me hagas esta pregunta!. El café es para demostrar que aunque tu vida te parezca llena, siempre hay un lugar para dos tazas de café con un amigo.'

10 comentarios:

DarkStar dijo...

Yo también he recibido esta historia varias veces, y es muy esclarecedora. Es clara y directa, con un mensaje fácil de entender.

Yo también pondré uno que he encontrado por la red, tampoco es mío:


EL MEJOR POLEN

Un agricultor, cuyo maíz siempre había obtenido el primer premio en la Feria del Estado, tenía la costumbre de compartir sus mejores semillas de maíz con todos los demás agricultores de los contornos.

El resto de agricultores de la comarca, acostumbrados a competir entre ellos y a guardar celosamente sus semillas, estaban intrigados por aquella muestra de generosidad. Por fin decidieron investigar el motivo.

Cuando le preguntaron por qué lo hacía, dijo:

— En realidad, es por puro interés. El viento tiene la virtud de trasladar el polen de unos campos a otros. Por eso, si mis vecinos cultivaran un maíz de clase inferior, la polinización rebajaría la calidad de mi propio maíz. Esta es la razón por la que me interesa enormemente que sólo planten el mejor maíz.

La calidad de vida de quienes conviven con nosotros también repercute en nuestra vida.

Anthony de Mello

Anónimo dijo...

Alma,el mundo seria perfecto si todos siguieramos los pasos que debemos.Pero desgraciadamente cada vez hay más huecos que llenar.Huecos que ván haciendo agujeros en nuestra alma dificilmente curables.
Pero hablando de mí misma,siempre trato de llenar esos pequeños huecos,puesto que a los grandes no llego.


darkstar,me quedo el final,la calidad de vida...Pero támpoco es siempre así.Un saludo guapa.
elcamaleón

alma dijo...

...DarkStar, dónde te metiste en sanmiguel? te estuvimos esperando

severinne dijo...

Alma, conocía la historia (a mi también me ha llegado por correo), y siempre me ha gustado. Una forma muy clara de enviar un mensaje muy complejo, a mi parecer. Como dice Cama, a veces resulta muy difícil llevarla a cabo como se supone que hay que hacerlo, pero no está nada mal que al menos siempre lo tengamos presente, es la mejor manera de no olvidarnos de lo importante y, si hay que desechar algo, que sea lo más banal de nuestras vidas.
Besos!

DarkStar dijo...

Alma, tengo un trancazo de aupa, así que solo me queda pasarlo sola sin contagiar a los demás.

Créeme, lo preferís. xD

Lorielana dijo...

Alma, DarkStar, que cuentos tan bonitos. Os dejo uno que me encantó a mí.
En un pueblo, hace muchos siglos, vivía un rabino. Cuando surgía algún problema en el pueblo, el rabino se dirigía al bosque, donde oraba, hacía un sacrificio, practicaba un ritual y le encomendaba a Dios: “Evita esta calamidad. Sálvanos”. Y cada vez, el pueblo se salvaba.
El rabino murió y llegó otro rabino. El pueblo enfrentaba dificultades, y la gente se congregó. El nuevo rabino fue al bosque pero no logró encontrar el lugar de los sacrificios, y se dirigió a Dios así: “Dios, no sé dónde es el sitio exacto donde oraba el anterior rabino, pero eso no importa. Tú conoces el sitio, así que oraré desde aquí”. El problema se evitó. La gente estaba feliz.

Pero entonces este rabino murió y vino otro rabino. Una vez más, el pueblo enfrentaba problemas, se presentaba una calamidad. El pueblo se congregó. El rabino fue al bosque, pero le dijo a Dios: “No sé dónde es el sitio, tampoco sé el rito, sólo sé la oración. Tú que lo sabes todo, no seas demasiado quisquilloso con los detalles. Escucha…”. Y le dijo lo que le tenía que decir. Y así evitó una calamidad.

Pero este rabino también murió y otro lo sucedió. Surgió una nueva dificultad, una epidemia se extendía, y el pueblo se congregó. La gente le dijo al rabino: “Vaya al bosque. Siempre se ha hecho así. Los antiguos rabinos siempre se dirigían allá”. Pero el nuevo rabino, sentado en su sillón, respondió: “¿Qué necesidad hay de ir allá? Él puede escuchar desde aquí. Además, no sé ni siquiera dónde se encuentra el lugar…”. Dirigió entonces la mirada al cielo y dijo: “Escucha, yo no sé dónde queda el lugar, ni conozco el ritual… ni siquiera sé la oración. Estoy al tanto de que el primer rabino iba allá y el segundo y el tercero y el cuarto… Te voy a contar un cuento, pues yo sé que a Tí te encantan los cuentos. Escucha por favor el cuento y ahórranos el problema”.
Entonces el nuevo rabino contó toda la historia de los antiguos rabinos. Y se dice que a Dios le gustó tanto el cuento que salvó al pueblo. Dios debe apreciar mucho los cuentos, pues Él mismo es un creador de mitos. ¡Fue Él quien comenzó con los chismes!

elcamaleón dijo...

Para empezar un poco en clave de humor¿que mala suerte tenian los rabinos,jaja.
Lorie,siempre pensé que la Fé,mueve el Mundo.(Sin más comentario)

DarkStar dijo...

Puff, a mí me gustaría que el mundo lo moviese el amor, pero está claro que lo que más importa en general es el dinero.

En cuanto hay una crisis, todos como locos, nadie quiere ceder en nada. Lo queremos todo y lo queremos ya, mientras otros no tienen nada y no queremos dárselo.

alma dijo...

Rescato el cuentito del nongratos,lo posteé allí para dedicarselo a todos los hatunes, hojas de otoño, amantes de la música y la belleza y me da penita que pierda:

Una hoja de otoño se desprendió del árbol y mientras caía al suelo en compañia de las otras hojas cantaron la maravillosa canción de los otoños, y caía y cantaba y cantaba ...entonces una hierba de invierno muy enfadada, las increpó: callaros de una maldita vez, no os soporto, estais destrozando todos mis sueños de invierno, no me dejais dormir!

La hoja, replicó, divertida aunque indignada: tú, nacida de lo bajo que habitas en lo bajo eres insignificante, incapaz de cantar...cómo pues te atreves a criticar mi canción, ni siquiera sabes lo que es una canción, ni siquiera puedes sentir la música...y siguió cantando y cayendo pero cuando llegó al suelo se durmió, y cuando despertó era una hierba de invierno...y al otoño siguiente cuando el aire se llenó de los bellísimos cantos susurrados por las hojas del otoño murmuró enfadada...malditas hojas de otoño, destrozan todos mis sueños de invierno.

Dark Star, sí estás mejor por favor asoma la patita, nos tienes preocupados, un beso.

Irati dijo...

Muy bonito, pero como dice cama, hay agujeros en el alma que son dificiles de tapar, sobre todo si es grande.

Yo también recibí hace tiempo por correo, pero con un matiz al final:
...........siempre hay un hueco para tomar una cerveza con un amigo.' =^_^=