...una fiesta que cada año arrastra a la gente hacia ese vacío entre Zaragoza y Valencia que llaman Teruel.
Empecemos por el principio: dicha fiesta, conocida como Ferias del Ángel, Vaquilla del Ángel o más comunmente "Vaquillas" dura en realidad tres días (Sábado, domingo y lunes), pero como hay que ir calentando motores, una semana antes empiezan las ferias.
Estas se basan en montar unas cuantas atracciones, y junto a ellas, un recinto donde durante toda la semana hay conciertos (Estamos hablando de Teruel, así que no imagineis grandes conciertos).
Y así va pasando la semana, con la gente cada vez más ansiosa, hasta que a falta de un par de días para el inicio real, empiezan a aparecer lo que denominaremos como "estructuras vaquilleras". Esto son, básicamente:
1. Los chiringuitos (o puestos de venta ambulante). Es fácil encontrarlos, sólo hay que seguir el olor a churros, gofres y kebab.
2. Las peñas, que empiezan a montar las carpas, escenarios y barras.
3. Los campings improvisados. Como el camping más cercano está a unos 7 km, cualquier lugar con un poco de césped es bueno para acampar.
Y ya, por fin, el viernes empieza la fiesta (que sí, que sí, que oficialmente es el sábado) que de momento, consiste en entrar al centro y disfrutar del ambiente, siempre acompañado de música, sea de la charanga o de las orquestas.
Llega el sábado, en el que la ciudad aparece desierta. ¿Por qué? Porque el sábado comienza todo realmente, y después de comer la multitud se concentra alrededor del torico, esperando el momento. Esto es: el alcalde da el pregón en la plaza de la catedral, el Vaquillero del año toca el campanico, se entrega el pañuelo a quién le toca llevarlo hasta la fuente, y una vez allí, el/los elegidos suben hasta alcanzar el torico y le ponen el pañuelo, dando así el comienzo a la fiesta. ¿Y después del pañuelico qué? Pues después fiesta, bastante parecida a la del viernes pero con mucho mejor ambiente.
Y amanece el domingo, y es por todos sabido que hay que madrugar para comprar el regañao, así que lo mejor es no dormir. Por la tarde, hay toros, pero no se va a la plaza a verlos, se va a merendar el regañao que compraste por la mañana al son de las charangas.
Después de esto, los forasteros empiezan a desaparecer (la leyenda dice que el lunes se trabaja en el resto de España).
Y ya de madrugada llega una de las cosas más antiguas de la Vaquilla. A partir de las 5:00 salen uno tras otro los toros desde la plaza, cruzando el viaducto, hasta el centro.
Cuando esto acaba, se suele ir a dormir, pero la ciudad no se queda desierta como el sábado. ¿Por qué? Porque por la mañana hay vaquillas ensogadas para los niños, y claro, siempre hay un abuelo dispuesto a acompañarlos. Por la tarde, los ensogaos son toros, pero si no te gustan, siempre puedes hacer muchas otras cosas, como dar un paseo en barco.
Y así, con la quitada del pañuelico por la noche, y la traca, acaban las fiestas, suerte que existe el Martes de Vaquillas, aunque claro, éste sólo es fiesta si tu jefe es majete.
Así que, esto son las Vaquillas, como se aprecia, fuente de inspiración para obras de arte, y creadoras de pequeñas historias, como la del carrito de Eroski que apareció abandonado el martes, y que no tendría nada de extraño de no ser porque en Teruel no hay Eroski. Pero por si yo no le he dado la suficiente emoción, aquí os dejo un vídeo que seguro que sí lo consigue.
Empecemos por el principio: dicha fiesta, conocida como Ferias del Ángel, Vaquilla del Ángel o más comunmente "Vaquillas" dura en realidad tres días (Sábado, domingo y lunes), pero como hay que ir calentando motores, una semana antes empiezan las ferias.
Estas se basan en montar unas cuantas atracciones, y junto a ellas, un recinto donde durante toda la semana hay conciertos (Estamos hablando de Teruel, así que no imagineis grandes conciertos).
Y así va pasando la semana, con la gente cada vez más ansiosa, hasta que a falta de un par de días para el inicio real, empiezan a aparecer lo que denominaremos como "estructuras vaquilleras". Esto son, básicamente:
1. Los chiringuitos (o puestos de venta ambulante). Es fácil encontrarlos, sólo hay que seguir el olor a churros, gofres y kebab.
2. Las peñas, que empiezan a montar las carpas, escenarios y barras.
3. Los campings improvisados. Como el camping más cercano está a unos 7 km, cualquier lugar con un poco de césped es bueno para acampar.
Y ya, por fin, el viernes empieza la fiesta (que sí, que sí, que oficialmente es el sábado) que de momento, consiste en entrar al centro y disfrutar del ambiente, siempre acompañado de música, sea de la charanga o de las orquestas.
Llega el sábado, en el que la ciudad aparece desierta. ¿Por qué? Porque el sábado comienza todo realmente, y después de comer la multitud se concentra alrededor del torico, esperando el momento. Esto es: el alcalde da el pregón en la plaza de la catedral, el Vaquillero del año toca el campanico, se entrega el pañuelo a quién le toca llevarlo hasta la fuente, y una vez allí, el/los elegidos suben hasta alcanzar el torico y le ponen el pañuelo, dando así el comienzo a la fiesta. ¿Y después del pañuelico qué? Pues después fiesta, bastante parecida a la del viernes pero con mucho mejor ambiente.
Y amanece el domingo, y es por todos sabido que hay que madrugar para comprar el regañao, así que lo mejor es no dormir. Por la tarde, hay toros, pero no se va a la plaza a verlos, se va a merendar el regañao que compraste por la mañana al son de las charangas.
Después de esto, los forasteros empiezan a desaparecer (la leyenda dice que el lunes se trabaja en el resto de España).
Y ya de madrugada llega una de las cosas más antiguas de la Vaquilla. A partir de las 5:00 salen uno tras otro los toros desde la plaza, cruzando el viaducto, hasta el centro.
Cuando esto acaba, se suele ir a dormir, pero la ciudad no se queda desierta como el sábado. ¿Por qué? Porque por la mañana hay vaquillas ensogadas para los niños, y claro, siempre hay un abuelo dispuesto a acompañarlos. Por la tarde, los ensogaos son toros, pero si no te gustan, siempre puedes hacer muchas otras cosas, como dar un paseo en barco.
Y así, con la quitada del pañuelico por la noche, y la traca, acaban las fiestas, suerte que existe el Martes de Vaquillas, aunque claro, éste sólo es fiesta si tu jefe es majete.
Así que, esto son las Vaquillas, como se aprecia, fuente de inspiración para obras de arte, y creadoras de pequeñas historias, como la del carrito de Eroski que apareció abandonado el martes, y que no tendría nada de extraño de no ser porque en Teruel no hay Eroski. Pero por si yo no le he dado la suficiente emoción, aquí os dejo un vídeo que seguro que sí lo consigue.
6 comentarios:
Anotaciones:
1. Kelna, MUY divertido y MUY bien narrado.
2. Parece que en Teruel sí hay gente. Esa plaza está petada.
3. La del carrito misterioso, MUY grande.
4. Esa foto: MUY grande, Kelna. Sobre todo la comparativa con el Sorolla.
5. Apuntado queda para cuando la agenda lo permita.
P.S.: ¡Un besazo, Kelna! :D
Un barco en teruel? claro, ya te decia yo que teneis playa, pero me lo discutias :P
Hay que ver lo que cunden en Teruel tres días de fiesta, la de gente que se ve en esa plaza, y la maravilla que pintó Sorolla inspirándose en los Campings improvisados de Teruel :D
Gracias Kelna por compartir tu fiesta con nosotros y aclarar esas dudas que algunos teniamos sobre tu tierra....me ha impresionado el barco, casi tanto como el misterio del carrito.
Besos preciosa.
Kelna, una vez más me quito el sombrero ante tí, como diría un amigo ¡Eres una crack! XP
Lo del carrito me ha encantado, pero lo del barco no me ha sorprendido en absoluto, en una ciudad con una hatun, debe haber barcos :D.
Besitos, preciosa.
Muchas gracias Kelna, por abrir nuestros horizontes e instruirnos en el ancestral rito de la fiesta (tan necesario para los hatunes como el nadar), jejeje.
Habrá que apuntarle en la lista de "debe", junto con la preciosa feria medieval que tenéis.
:) :) :)
Me encanta. Que bárbara eres Kelna. Gracias
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